Cuando los bancos caen, los ahorradores no deberían quedarse con las manos vacías. El PE presiona a los Estados miembros para que cierren el acuerdo sobre las garantías de depósitos.

Seguridad para sus ahorros

https://api.multimedia.europarl.europa.eu/documents/20125/15875769/n001-120221-001-es_mf.srt

Esta imagen es emblemática  de las crisis bancarias modernas.

Se reconocía un banco en quiebra  por las largas colas ante sus puertas,

clientes del banco haciendo cola,  casi siempre en vano,

para retirar sus ahorros  de la entidad financiera quebrada.

Cuando Northern Rock se vino abajo  en 2008, seguida de Lehman Brothers,

muchos europeos se quedaron de nuevo  con las manos vacías.

Para restablecer la confianza  en el sector bancario,

la Comisión propuso una ley  que obliga a los bancos a crear fondos

para garantizar el dinero del depositante  con normas homogéneas en toda la UE.

La experiencia muestra que en una crisis,  los bancos no pueden salvarse mutuamente

y a la vez proteger a los depositantes  por completo.

El PE hizo algunas enmiendas  pero respaldó el proyecto.

Sin embargo, algunos estados  con industrias bancarias importantes

no acordaron que los bancos apartaran  fondos a estos fines.

Los eurodiputados esperan que el dossier  se cierre pronto para pasar a otros asuntos.

Es una pena que el Reino Unido sea  tan reticente a las garantías de depósitos,

ya que esta es la parte de la regulación  menos problemática.

El asunto decisivo es cuánto capital  debe poseer un banco

y en este punto Gran Bretaña  está de acuerdo.

Todo indica a que la coalición de estados  que bloquean la regulación está dividida.

En cuanto los líderes se decidan,  podremos obtener resultados rápidamente

que garantizarán una protección  del depositante de calidad en Europa.