El Parlamento reiteró su llamamiento a garantizar el acceso libre al material de fitomejoramiento. Los eurodiputados quieren garantizar que los agricultores de la Unión Europea puedan innovar para encontrar soluciones a la crisis climática y a las nuevas enfermedades de las plantas. No se debe permitir que las multinacionales ricas patenten la vida natural, porque crearían monopolios que elevarían los precios de los alimentos.

EU politics

consumer protection

food safety

health (2841)

Environment

No a las patentes sobre plantas y semillas obtenidas por selección natural

https://api.multimedia.europarl.europa.eu/documents/20125/9538208/N01-PUB-190923-PLATE-ES.srt

 otorgó una patente por una nueva variedad de tomate ideal para hacer ketchup.

Se obtuvo utilizando únicamente procesos biológicos, 

de modo que no había sido modificada genéticamente.

La patente suscitó una respuesta negativa inmediata y sus detractores acusaron a la OEP de patentar la vida.

Entonces la Oficina modificó su política, 

pero el caso se llevó a la sala de recurso.

El Parlamento Europeo trabaja para conseguir

que los productos obtenidos mediante procesos biológicos no se puedan patentar.

Creemos que el acceso libre al material vegetal es esencial para la capacidad de innovación

 del sector europeo de fitomejoramiento y de los agricultores,

 así como para la variedad genética de nuestros cultivos.

Los eurodiputados quieren que los agricultores de la UE puedan innovar,

 especialmente ante la crisis climática.

La selección de nuevos tipos de plantas favorece la diversidad genética.

Todos los años aparecen nuevas enfermedades y plagas en las plantas

 y necesitamos desarrollar nuevos cultivos alimentarios

 que sean resistentes a dichas enfermedades y plagas.

Si permitimos las patentes, se perjudicará a la innovación y al desarrollo.

Creo que es un gran riesgo para todo el suministro mundial de alimentos.

Los eurodiputados dicen que los pequeños productores pueden ser los más afectados por estas patentes.

El Parlamento también afirma que permitir que las empresas patenten ciertas variedades de alimentos

 crearía un monopolio que, a su vez, elevaría los precios de los alimentos en la Unión.