Una delegación del Parlamento se dirige a Washington para ir hasta el fondo del supuesto espionaje de EE. UU. El director de la NSA afirma que las acusaciones de espionaje telefónico son falsas.

Los eurodiputados investigan la vigilancia masiva de Washington

https://api.multimedia.europarl.europa.eu/documents/20125/16420232/n001-131030-001-esx.srt

¿A quién espían en Europa  los Estados Unidos?

¿Cómo pueden evitarse los abusos  de la inteligencia internacional?

A su llegada al Congreso de EE. UU.,  los eurodiputados buscaban respuestas.

El Congreso los recibió  con una reunión con Mike Rogers,

presidente de  la Comisión Permanente sobre Inteligencia.

Estamos definiendo los ámbitos  en los que podemos trabajar juntos

para cubrir nuestras diferencias,  proteger la relación

entre nuestros aliados de la UE y EE. UU.  y a la vez, proteger la capacidad

de recabar información que nos mantiene  seguros a nosotros y a nuestros aliados.

¿Cómo lograr el equilibrio perfecto  entre seguridad y privacidad?

Para la UE, las revelaciones  de espionaje telefónico han puesto en duda

que la administración estadounidense  respete los límites.

A nosotros también nos preocupa  la seguridad y lo hemos dejado claro.

Pero también debemos encontrar  un equilibrio para proteger la privacidad.

Creo que estas conversaciones abiertas  pueden restaurar la confianza.

El director de la NSA ha desmentido  las acusaciones de espionaje telefónico

Afirma que sus socios europeos  compartían esos datos con ellos.

Los ponentes de la delegación europea  se han reunido con el director de la NSA.

Según ellos, aunque se confirme  esa información,

De ser así,  se le debe poner fin de inmediato.

Si uno es pecador,  no puede culpar a otros por pecar.

Las acusaciones de vigilancia masiva  y espionaje de particulares se suceden.

Es muy importante que intentemos  sacar a la luz la verdad del asunto.

La verdad es algo difícil de determinar  con las agencias de inteligencia,

Según Jan Philipp Albrecht,  especialista en derechos digitales

y protección de datos,  debe lograrse un acuerdo transatlántico.

Necesitamos crear nuevas normas  de protección de la privacidad

y estándares comunes para controlar  a los servicios de inteligencia

y que la gente recupere la confianza  en la democracia y el Estado de Derecho.

Unas normas claras podrían devolver  la confianza a las empresas europeas

ahora que se está negociando  el acuerdo de libre comercio.